www.enriquedans.comLa IA contra la Torre de BabelCuando, a finales de noviembre del año pasado, muchos usuarios empezaron a utilizar ChatGPT para hacer traducciones de textos, la cosa empezó a estar clara: los resultados eran incomparablemente mejores que los que brindaban los traductores automáticos convencionales. De hecho, podías incluso adaptarlos a tu forma de escribir: bastaba alimentar al algoritmo con cuatro o cinco textos escritos por ti o con algunas buenas traducciones de textos tuyos a un idioma determinado, para que ChatGPT tradujese «con tu estilo», algo completamente fuera del alcance de los traductores automáticos al uso. A partir de ahí, han hecho únicamente falta unos